domingo, 18 de julio de 2010

Esa mañana me desperté tarde. Deberían ser las 12 del mediodía. El sol entraba fuerte y majestuoso por la ventana iluminando la estancia. Me despojo de las sabanas moradas que cubrían mi cuerpo y me levanto de un salto de la cama. Me atuso un poco el pijama y el pelo. Me calzo mis zapatillas de la Daisy y salgo de mi habitación. Por el pasillo puedo percibir el olor a café. Entro en la cocina aun un poco adormilada y veo a mi padre de espaldas a mí, leyendo el diario del domingo. Me acerco a él por la espalda y le doy un beso en la mejilla, pero el contacto de mis labios sobre la mejilla de mi padre se me hace extraño. Está frío. Le miro y le veo la cara. Blanca. No hace ningún movimiento. Mi padre mantiene la vista en el periódico. Me hecho para atrás cuando me doy cuenta de lo que está pasando. Mi cara está desencajada y de mis ojos caen lágrimas de desaparición. Salgo a buscar a mi madre. La encuentro tendiendo la ropa. No se mueve. Está estancia. Otro maniquí. Un grito desgarrado sale de mi garganta. El suelo se abre bajo mis pies. Va enguyendo todo lo de mi alrededor, mientras va creciendo. Hasta que me enguya a mi también.


Salto de la cama. Mi respiración está agitada y una fina capa de sudor cubre todo mi cuerpo. Por la ventana entra un tímida luz del exterior. Me deshago de las sabanas azules que cubren mi cuerpo. Me levanto poco a poco de la cama y me calzo mis zapatillas de la Hello Kitty. Salgo de la habitación y me dirijo hacia la cocina. El olor a café vuelve a estar presente. Entra en la cocina y me encuentro la figura de su padre de espaldas a mí. Me acerco y le doy un beso en la mejilla. Él me responde un "buenos días" muy alegre. Me siento a su lado y cojo la cafetera y la pongo en mi taza, después cojo la leche y me pongo un poco. Me lo bebo en pocos minutos y me quedo conversando con mi padre. Entra mi madre por la puerta y se acerca a mi dándome un beso en la mejilla y diciéndome "buenos días princesa de la casa". Sonrió y paso el día con ellos.





Ese sueño me ha estado persiguiendo durante años.
He llegado a tener miedo a soñar. Ahora pienso:
Tengo pesadillas con mi vida, o , vivo en una pesadilla.

sábado, 17 de julio de 2010

Una señora, con el pelo canoso, espera en el mismo banco todo el día. Siempre viste un vestido negro con algunos destellos plateados. Su cabeza queda coronada por una pamela negra. Sus manos descansan sobre el regazo de sus doloridas y viejas piernas. Sus manos son blancas como la nieve. Sus dedos están adornados con anillos de inmensos rubíes. Su cara demacrada por el paso del tiempo y las arrugas, presentan la clara evidencia de la vejez. Sus labios, siempre perfilados a la perfección con carmín rojo, esperan a ser besados. Aunque sus facciones se dibujara la tristeza y la añoranza de un amor lejano, sus ojos destellaban esperanzados. El día pasa y ella sigue allí. La toman por loca, lunática, enferma, chiflada. Pero ellos no saben nada. Ella lo único de que está enferma es de amor.

viernes, 16 de julio de 2010

Ella lloraba en una esquina de la habitación. Se sentía frágil e indefensa en un mundo extraño para ella. En ese momento no podía pensar en otra cosa que no fueran ellos. Echa de menos los nervios anteriores del, como ha dicho millones de veces, mejor momento de su vida. Echa de menos el no dormir por las noches pensando en que será maravilloso. Echa de menos las conversaciones kilométricas que tenia sobre el mismo tema. Echa de menos cada momento que ha vivido junto a ellos. Con su música. Con sus vídeo-clips. Con sus rostros.
Alza la vista y mira a las paredes de su habitación. Muchas miradas se clavan en ella. En algunos salen sonriendo, en otros serios, pero son ellos.
Echa de menos como
Gustav aporreaba sus timbales. Echa de menos como Georg movía su melena al compás de la música. Echa de menos como Tom decía "gracias". Echa de menos como Bill le hacia sentirse única entre tanta gente.
Ella lloraba en una esquina de la habitación. Se sentía frágil e indefensa es un mundo extraño para ella. En ese momento no podía pensar en otra cosa que no fueran ellos.
Pero no lloraba de tristeza, lloraba porque ha conseguido lo que quería. Lloraba porque ha conseguido hacer realidad su sueño. Está orgullosa de ella y de ellos. Ellos que son los que le hacen emocionarse por escuchar una de sus canciones.

Porque os debo el infinito. Gracias

miércoles, 7 de julio de 2010

Tú. Persona libre. Persona sin ataduras. Persona feliz, ayudame a salir de mi encrucijada de sentimientos y locura en la que estoy sumergida. Te pido ayuda para que me escuches. Espero que no sea mucha molestia. Quiero ser libre como tú, pero no me dejan. Quiero volver a sentir el aire en mis mejillas, el sol en mi piel y la lluvia en mi pelo. Porfavor, ayudame para que esto se haga realidad, otra vez.
Si me quieres ayudar solo has de pensar en mi así no moriré. Recordar esto:
Una vez oí que cuando una persona muere definitivamente es cunado todos le olvidan.
Porfavor no dejes que mi vida quede a merced de un pensamiento inútil.
Rainbow

lunes, 5 de julio de 2010

3 meses que hace que mi sueño se esfumara para siempre.
3 meses que hace que compartí millones de sensaciones con la gente que me rodeaba.
3 meses que hace que no pude dormir.
3 meses...

Simplemente echo de menos los nervios y lo momentos de ese día.



Os echo de menos.

domingo, 4 de julio de 2010

Träume

-¿Qué te ocurre?
- ¿Eh?... No nada.
- Claro y por eso tus ojos se están ahogando por tus lágrimas.
- No, enserio, que no me pasa nada.
- Soy tonto, pero no persigo coches aparcado. ¿Me lo contarás?
- Es que es algo que no me gusta hablar con gente que conozco de poco.
- Ya, te entiendo y te comprendo. No es de mi incumbencia. Se lo contarás a otra persona que conozcas más. Pero ¿Me puedo quedar aquí contigo? No diré nada ni seré pesado.
- De acurdo.

Los minutos transcurrieron y se sentían cada vez más relajados. El chico miraba el horizonte como la luna emergía del mar y ella se miraba la puntas de los pies.

-¿Te puedo hacer una pregunta?
- Ya me la has hecho...
-¿Eh? No me refiero a otra.
- Claro.
- ¿Cómo me consideras?
- Pues como un amigo con el que no tengo nada de confianza. Lo siento.
- No tranquila, no pasa nada. A mí también me pasa.

El silencio se volvió a apoderar de esa playa. La chica miraba de reojo al muchacho que se sentaba a su derecha y veía que sonreía.

- No confíes de nadie.
- ¿Perdona?
- Que no confíes en nadie, solo conseguirás acabar mal.
-¿Cómo? No te entiendo.
- Ya lo entenderás.
- No, no te vayas.
- Lo siento. Adiós.

La chica se sobresalta y bota de la cama. Esta perlada de sudores fríos. Respira con dificultad.


- Abuela y tu ¿Cómo sabes todo eso?
- Porque la conozco mejor que a nadie
- Y el chico ¿Quien era?
- De la única persona que se llegó a enamorar esa chica.
- ¿Quién es esa chica?
- Venga, a la cama que ya es muy tarde.
- No, yo quiero que me digas quien es esa chica.
- Ya te diré quien es esa chica. Pero ahora no.
- Seguro que era una chica preciosa y con una larga vida de provecho.

Cuando oigo esas palabras salir de la boca de mi nieta, un nudo en la garganta y lágrimas acumuladas, la arropo a la pequeña en la cama.

- Estoy segura que aunque el chico fuera un sueño, lo encontró en alguna parte del mundo.
- No pienses más en esa historia y
duerme. Que ya es tarde.
- Buenas noche abuela.
- Buenas noches cariño.

Le doy un beso en la frente y apago la luz de la
mesita de noche. Salgo de la habitación y me voy al sillón que se sitúa al lado de la ventana. Era invierno y las calles estaban llenas de nieve. Alzo la vista al cielo y allí espero a que los recuerdos de ese sueño lleguen a mí. Han pasado horas que contemplo el cielo. Me levanto del sillón y me acerco a su habitación. La encuentro de lado con Mr. Muma agarrado en su brazo. Me siento en la cama a su lado. Le aparto el pero de la cara y sonrío. Me pregunto que estará soñando.

- Esa chica soy yo y el chico es al único hombre que he amado. Aun por las noches sueño con ese momento y la juventud vuelve a mi como por
arte de magia y cuando vuelvo a abrir los ojos todo se esfuma. No pierdas nunca tus sueños e intentarlos hacer realidad.






Una vez, hace ya mucho en un libro leí una frase de la que estoy completamente segura.

Recordamos lo que nunca sucedió.

Freunde

¿Qué son los amigos?
Son personas que te tropiezas por el camino de tu vida, con los que confías y quieres.
¿Cómo son los amigos?
Da igual como sean de aspecto, pueden ser altos, bajos pelirrojos, rubios, gordos, flacos. No importan sus apariencias. Lo que importa es la capacidad de su corazón.
¿Cuántos son los amigo que puedo tener?
De amigos/conocidos, puedes tener muchos, pero de amigos de verdad los podemos contar con una mano y ya tenemos suficiente.
¿Por qué tenemos amigos?
Porqué son personas que nos ayudan sin ningún impedimento.
¿Cuándo están los amigos?
Cuando los necesitamos en cualquier momento. No importa la hora que sea, el día, si haga calor o frió. Simplemente estaremos a su lado escuchándolo, aunque nos digan que el cielo es azul y que los coches aparcados están parados. No importa que nos digan. Lo que importa es que estemos en ese momento con él/ella.
Y¿Por qué, cuando me siento sola o me siento indefensa siento que gente vela por mi?
Porqué los verdaderos amigos están en todas las partes de ti.



Un día oí una frase que me ha perseguido toda mi vida y que se quedará en mi para toda la eternidad: Si no es en persona será por las estrellas.